Producciones nacionales abordan temáticas sociales y políticas desde miradas transgresoras, con estilos que combinan minimalismo, emocionalidad y propuestas experimentales. El académico UCSC, Manuel Rivera, analiza sus rasgos y desafíos internacionales.
La carrera hacia los Premios Óscar 2025 ya comenzó y Chile no se queda atrás. Diversas producciones nacionales fueron inscritas para competir por un cupo en la categoría de “Mejor Película Internacional”, en un escenario donde destacan relatos profundamente íntimos, el protagonismo de la memoria histórica y temáticas sociales que dialogan con problemáticas universales.
En esta ocasión, Chile presenta seis filmes: La Ola (dirigida por Sebastián Lelio), Patio de Chacales (Diego Figueroa), La Misteriosa Mirada del Flamenco (Diego Céspedes), Denominación de Origen (Tomás Alzamora), Los Hiperbóreos (Cristóbal León y Joaquín Cociña) y Oro Amargo (Juan Francisco Olea). Además, otras producciones nacionales también destacan en nominaciones técnicas: María, de Pablo Larraín, compite en Mejor Fotografía gracias al trabajo del director de fotografía Ed Lachman; mientras que Gladiator II, protagonizada por el chileno Pedro Pascal, está nominada en Mejor Vestuario.
El académico de la carrera de Dirección Audiovisual de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC), Manuel Rivera, subraya que “las películas nacionales que se presentan como candidatas para los Premios Óscar 2025 presentan en su mayoría relatos intimistas, con un alto desarrollo psicológico de personajes, puestas en escena minimalistas, atmósferas realistas y guiones que priorizan lo emocional por sobre lo explícito”.
Entre las cartas más comentadas está La Ola, el musical de Sebastián Lelio aún pendiente de estreno en salas, que —a juicio de Rivera— “tiene una estética más explosiva, con un diseño de producción que prioriza lo coreográfico, al tratarse de un musical”.
Temáticas de impacto
El cine chileno postulado a la Academia de Hollywood no solo destaca por sus formas, sino también por el fondo de sus relatos. Rivera enfatiza que “todas abordan temáticas contemporáneas de impacto: memoria histórica, violencia, rol de la mujer, pobreza o infancia, por ejemplo. Se funden lo político, lo social y lo económico desde miradas transgresoras y con identidad local”.
Según el académico de la UCSC, ese sello identitario podría ser clave. “En casos anteriores, la Academia ha premiado este rasgo más particular de naciones alejadas a su realidad. Allí el cine chileno tiene una ventaja competitiva para resonar internacionalmente”.
Al ser consultado sobre los estilos narrativos dominantes en el cine nacional, Rivera advierte que no existe un único camino. “Es complejo hablar de narrativas particulares en el cine chileno, porque existen diversos períodos, tensiones y disputas estéticas. Probablemente el sentido de lo político puede ser transversal, aunque no siempre de manera explícita”, sostiene.
A su vez, el experto añade que la clave radica en “la emoción de los personajes, que inicialmente es minimalista, pero se despliega narrativamente a través de estéticas semi documentales, montajes no lineales y propuestas experimentales”.
Difusión y estrategias para competir en la industria
Uno de los grandes desafíos es la circulación de estas obras. Rivera plantea que la estrategia no debe limitarse a la participación en certámenes, sino también a la creación de audiencias locales.
“Es fundamental aumentar la visibilidad fuera de la Región Metropolitana, fortalecer salas independientes y cineclubes, y generar espacios de reflexión desde las universidades. A nivel internacional, se requiere apostar por una marca país ligada a la autoría y las temáticas sociales, aumentar presencia en festivales, establecer vínculos con plataformas de streaming y finalmente, invertir en los lobbies estratégicos de cada evento para abrir espacios de cooperación”.
De esta manera, las producciones chilenas nominadas no solo representan un hito cultural, sino también la consolidación de un cine que, desde su identidad, busca dialogar con los desafíos del mundo contemporáneo.